Los eventos deportivos mundiales no solo son hitos para los atletas, los equipos y los países participantes, sino también para la industria de los eventos. Grandes espectáculos como los Juegos Olímpicos y la Copa del Mundo amplían los límites de lo posible, y los efectos de esto se sienten en nuestra industria durante años. En este blog exploraremos cómo eventos como estos han dado forma al futuro de las operaciones de eventos.

Los Juegos Olímpicos de Londres 2012

Londres acogió los Juegos Olímpicos de Verano por tercera vez en julio y agosto de 2012. Fue una empresa enorme y un éxito ampliamente celebrado, seguido en todo el mundo tanto en persona como a través de la retransmisión internacional.

Para llevarlo a cabo, se necesitó una gran cantidad de personal, y una de las iniciativas más destacadas fue el programa «Games Makers»: una campaña de voluntariado a gran escala diseñada para apoyar todos los aspectos de los Juegos. Los voluntarios ayudaron en todo, desde dar la bienvenida a los espectadores y gestionar el flujo de público, hasta asistir a los atletas y apoyar la logística entre bastidores.

Los candidatos pasaron por un proceso de selección formal y los elegidos recibieron uniformes a medida y una formación exhaustiva. Estos voluntarios fueron muy elogiados por su entusiasmo, profesionalidad y contribución a la experiencia general de los Juegos.

El éxito de los Games Makers aumentó las expectativas en torno a la gestión de voluntarios en grandes eventos. Demostró que, con la estructura y el apoyo adecuados, las funciones de los voluntarios podían ser cualificadas, respetadas y fundamentales para ofrecer una experiencia de alta calidad. La iniciativa inspiró programas similares en otros eventos internacionales y dejó un legado duradero sobre cómo se recluta, forma y gestiona al personal de los eventos, ya sea remunerado o no.

Copa Mundial de Qatar 2022

Entre noviembre y diciembre de 2022, Qatar acogió la Copa Mundial de la FIFA, un evento que redefinió la planificación de la seguridad en los estadios y los espacios públicos. Contó con una de las operaciones de seguridad más completas jamás vistas en un evento deportivo, que incorporó la colaboración internacional, tecnología de vigilancia avanzada y sistemas de control de multitudes para gestionar de forma segura a millones de aficionados al fútbol.

El personal también recibió una amplia formación sobre las normas y expectativas culturales locales, lo que garantizó una interacción respetuosa e informada con los visitantes de todo el mundo en una región conocida por sus códigos sociales más estrictos. Además, la tecnología de reconocimiento facial y la venta de entradas a través del móvil desempeñaron un papel fundamental en la optimización de las operaciones y la mejora de la experiencia general de los asistentes. Se utilizaron aproximadamente 15 000 cámaras de reconocimiento facial en ocho estadios, lo que mejoró tanto la eficiencia como la seguridad.

Super Bowl

La Super Bowl es una olla a presión anual: cada año es una oportunidad para superar los límites en los eventos. Su impresionante innovación en el control de multitudes y el transporte nos ha proporcionado valiosas lecciones sobre cómo mover grandes multitudes con fluidez y con las mínimas molestias. Además, las asociaciones de seguridad privada han puesto de manifiesto el poder de la combinación de equipos del sector público y privado. La especialización del personal ha dado lugar a la aparición de funciones específicas, como escoltas VIP, técnicos de asistencia y equipos de interacción con los aficionados. Cada año, el equipo de producción de la Super Bowl se supera a sí mismo al llevar a cabo un evento de gran éxito e inspirador bajo la mirada de todo el mundo.

La evolución de la seguridad tras grandes eventos

Por desgracia, las tragedias del pasado han acabado siendo a menudo catalizadores del cambio en el mundo de la seguridad de los eventos. El atentado de la maratón de Boston provocó un gran aumento de los eventos que reforzaron sus protocolos. Desastres como estos han dado lugar a un aumento de los controles de antecedentes y a sistemas de acreditación de varias capas. También han reforzado la importancia de la seguridad visible frente a la invisible, y la ubicación estratégica del personal y la supervisión basada en la tecnología.

Un impacto duradero

Para avanzar, tenemos que mirar atrás. Aprendiendo tanto de los éxitos como de los retos de eventos pasados, podemos seguir mejorando todos los aspectos del sector de los eventos, desde la planificación y la logística hasta la dotación de personal y la ejecución sobre el terreno.

La dotación de personal impulsada por la tecnología ha abierto la puerta a la programación basada en aplicaciones, los registros digitales y la comunicación en tiempo real. La logística se ha vuelto más inteligente, gracias a los modelos anteriores de sistemas de transporte, flujo de multitudes y gestión de puntos de acceso. También se ha puesto un mayor énfasis en la experiencia del personal, con una mayor atención a los descansos justos, los horarios manejables y las oportunidades de mejora de las competencias que favorecen el desarrollo profesional a largo plazo. Eventos como los Juegos Olímpicos, la Super Bowl y la Copa del Mundo han desempeñado un papel fundamental en la configuración de los estándares actuales de dotación de personal para eventos, especialmente en entornos a gran escala y de alta presión.

Hoy en día, el éxito en la dotación de personal para eventos es una combinación de lecciones del pasado e innovación centrada en el futuro. Como industria, debemos seguir aprendiendo de estos momentos históricos y utilizarlos para impulsar el progreso, juntos.